La FAO asegura que la tala ha dismuido en muchas partes del planeta gracias a campañas lideradas por los gobiernos. Así lo celebró esta semana la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) a partir de su reporte Evaluación de los recursos forestales mundiales 2010.
Fuente: Ecoportal
A pesar de que algunos países aún mantienen tasas alarmantes de tala forestal, el ritmo de la deforestación del planeta retrocedió por primera vez en los últimos 10 años.
La FAO asegura que la tala ha dismuido en muchas partes del planeta gracias a campañas lideradas por los gobiernos.
Así lo celebró esta semana la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) a partir de su reporte Evaluación de los recursos forestales mundiales 2010.
El reporte muestra que 13 millones de hectáreas de bosque fueron deforestadas por año entre el 2000 y el 2010 y, aunque esto parece mucho, es al menos tres millones de hectáreas menos por año que lo que se deforestaba en los 90, cuando la tasa anual era de unos 16 millones.
Según Eduardo Rojas, subdirector general de la FAO, la regresión ocurrió gracias a esfuerzos coordinados en todo el mundo. Por ejemplo, destacó que China, India y Vietnam aumentaron sus superficies boscosas en casi cuatro millones de hectáreas por año.
Las mayores pérdidas de árboles se registraron en Brasil, Indonesia y Australia.
La reducción en Australia de medio millón de hectáreas se debe principalmente a la sequía que ha afectado la mayoría del país en años recientes, causada -se piensa- como consecuencia del cambio climático global.
Las cifras para Indonesia y Brasil no fueron muy sorprendentes pues ambos países tiene vastísimas áreas de bosques y grandes industrias madereras; aún así, la deforestación se está desacelerando.
Tanto Brasil como Indonesia reportan una caída significativa en la deforestación”, aseguró el doctor Loyche Wilkie. “En Brasil ha sido espectacular y eso se debe principalmente a que hay una meta política para reducir la deforestación en 80% para 2020 que está apoyada por el presidente”.
A medida que se reduce la deforestación, también ha habido un incremento en la siembra de nuevos bosques, particularmente en China, lo que arroja un neto positivo de tres millones de hectáreas al año.
La Evaluación de los recursos forestales mundiales se basa principalmente en los datos suministrados por los gobiernos.
Los detalles también incluyen el uso y administración de los bosques. Es aquí donde se están viendo resultados alentadores, según Eduardo Rojas, director general asistente del departamento forestal de la FAO.
La FAO está realizando otro estudio utilizando observación satelital del que esperan obtener una evaluación mucho más detallada y que será publicada el próximo año.