Red Agroforestal Chaco Argentina Redaf
El ingeniero Carlos Chiarulli, socio de la Red Agroforestal Chaco Argentina (REDAF), estuvo presente en la primera audiencia pública sobre la ley de Biocidas de la provincia de Chaco. Aportó la experiencia del proyecto de Ley de Fitosanitarios de la provincia de Santa Fe, para compartir aprendizajes y consideraciones que podrían ser útiles para la normativa chaqueña. Puso atención además sobre aquellas externalidades o costos socioambientales, que pese a ser evidentes, hasta ahora no son abordadas por ningún proyecto de ley.
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Chiarulli señaló que en el proyecto santafecino, que hasta el momento tiene media sanción en la cámara de diputados de esa provincia, hubo especial cuidado en definir por ley las distancias de aplicación a los centros poblados, que se estableció en cerca de 3 mil metros. También señaló que dieron importancia al órgano de aplicación, proponiendo que este sea colegiado, “dejar librado a un solo organismo empobrece la posibilidad de una buena aplicación de la norma”, indicó. Por eso, en el proyecto de la provincia de Santa Fe la propuesta es que el órgano de aplicación esté integrado por representantes del Ministerio de Salud, Ambiente y Producción.
Respecto a las distancias, Chiarulli señaló que estas se establecieron no sólo en relación a los centros poblados, sino también respecto a las fuentes de agua. “La contaminación de las napas es uno de los problemas más graves que está sufriendo Santa Fe, especialmente en las zonas del Chaco Húmedo. Por eso en el articulado se contempló una distancia también respecto a los cuerpos de agua de entre mil y 3 mil metros”, señaló.
Respecto a las externalidades socioambientales de la aplicación de agrotóxicos, Chiarulli señaló que las normativas en discusión en distintas provincias no las consideran, pese a que son evidentes. Entre estas detalló el desplazamiento forzado de pequeños productores campesinos “que cambia profundamente la demografía del territorio chaqueño”, y la alta tasa de deforestación que en el Chaco Argentino alcanza 250 mil hectáreas por año, una de las más altas del mundo. Chiarulli señaló que situaciones como estas nos obligan a cambian el eje del debate, ya que “ponen en cuestión el modelo de producción vigente”.
Escuchar la intervención del Ing. Carlos Chiarulli en la audiencia pública sobre la Ley de Biocidas de la provincia de Chaco
Me parece que la experiencia puede ser tranquilamente aplicable en Chaco y lo principal es que pueda haber una acción política sobre el tema para poner límites a la deforestación y tener un mayor control de los recursos.